Javier Zulueta riega de buen toreo Huelva
Enrique Toro y Carlos Tirado, que debutaban con picadores, estuvieron a un gran nivel, perdiendo premio con los aceros
Magnífica novillada de José Luis Pereda, tanto por presentación, con animales de mucho cuajo y gran seriedad, como en juego, nobles y enclasados. Temple y mucha torería demostró durante toda la tarde Javier Zulueta, paseando una oreja de su primero y los dos apéndices del mejor astado del festejo, el cuarto. Resolutivo e inteligente Enrique Toro, que pudo haber cortado algún trofeo en cada uno de sus turnos de haber funcionado mejor la espada. Muy entregado y con oficio Carlos Tirado, que pensó delante de la cara de los animales, incluso llegando a improvisar. Seguridad y serenidad en el torero de Ayamonte, que sin embargo se atascó con la tizona.
El primer novillo de la tarde mostró las fuerzas justas en el capote de Javier Zulueta. El novillero sevillano lo llevó galleando por chicuelinas al caballo de picar, después instrumentó un templado quite por delantales. El animal de José Luis Pereda tuvo clase y calidad en la muleta de Zulueta, que basó el trasteo en la mano derecha, conduciendo con temple y mucho pulso la noble embestida hasta el final. En el tramo concluyente de su labor con la franela, también llegaron varios naturales estimables, dando el pecho y cargando la suerte, corrió la mano muy despacio el hispalense. Estocada algo tendida.
Muy despacio meció el capote en el recibo por verónicas al cuarto, Javier Zulueta. El novillo embistió con calidad al percal, sobre todo por el pitón izquierdo. Bravo el de José Luis Pereda, persiguiendo el engaño con clase y bravura. Faena importante de Zulueta, al que hilvanó series por ambos pitones rotundas, macizas, sobresalientes las instrumentadas con la mano izquierda. Una faena de elgenacia y temple supremos. El astado de la divisa onubense de nota muy alta, que hizo las cosas siempre por abajo, con mucho recorrido y una enorme calidad, sin aburrirse de embestir detrás de la dulce muleta del novillero sevillano. Espadazo arriba.
Antes de la salida del segundo de la suelta, se interpretó por parte de la Banda de Música el pasodoble dedicado a San Juan del Puerto, localidad natal del novillero Enrique Toro. Buena condición mostró el novillo de José Luis Pereda en el capote del espada debutante. Por chicuelinas quitó Toro después del paso por el peto. Nobleza, clase, bravura y transmisión del animal de Pereda, al que toreó el espada de San Juan del Puerto por abajo, con temple y ligazón, con la muleta puesta por delante siempre. En la parte final del trasteo, se metió en los terrenos del animal, con entrega y garra. No funcionaron los aceros para el diestro onubense.
El quinto ejemplar de la tarde también demostró clase en el capote de Enrique Toro, buscando los vuelos de la tela rosa por abajo. El cornúpeta derribó al picador Manuel Jesús Ruiz «Espartaco». Novillo noble, con clase, algo huidizo pero sin rajarse nunca el José Luis Pereda, que recibió el brindis de Enrique Toro. La faena del torero de San Juan del Puerto estuvo presidida por la entrega, la disposición y las ganas, mejores las tandas que ejecutó con la mano derecha, al que puso la muleta planchada siempre, dejando entrever sus buenas condiciones. Un enrazado novillero que mostró su clasicismo. Dos pinchazos y estocada corta.
Al igual que sucedió antes con Enrique Toro, en este caso sonó el pasodoble «Ayamonte», en homenaje al otro novillero debutante de la tierra, Carlos Tirado. El utrero de José Luis Pereda humilló mucho en el capote de Tirado, tanto que se pegó una voltereta. Ejecutó un quite por chicuelinas Carlos Tirado, en el que el astado embistió con mucha clase. Muy templado Carlos Tirado, que realizó las cosas con gusto, con expresión, en todo momento muy tranquilo, con seguridad y firmeza, convencido de lo que le tenía que hacer a su oponente. En el tramo final del trasteo se montó encima Carlos Tirado con expresión y gusto. Se atascó con la espada el torero de ayamontino.
Voltereta fuerte la que se pegó el sexto novillo de la tarde en el recibo capotero de Carlos Tirado, que le bajó muchos las manos. Con cuantioso temple lo pasó de muleta Tirado, al que puso la pañosa por delante, no dejándole pensar sino perseguir la tela roja. El novillero de Ayamonte le corrió la mano muy despacio, sin tirones, acariciando la embestida de su antagonista. Muy entregado Carlos Tirado, improvisando en la cara del novillo, disfrutando en un día tan especial para él, con cabeza también, jugando con los terrenos más apropiados para sacarle el máximo partido. Nuevamente no le funcionaron los aceros al joven torero ayamontino.
Ficha del festejo: |
Plaza de toros de La Merced (Huelva). Segunda de la Feria de Colombinas. Media entrada. Novillos de José Luis Pereda, bien presentados y de buen juego. Javier Zulueta, oreja y dos orejas. Enrique Toro, que debutaba con picadores, palmas tras aviso y ovación tras aviso. Carlos Tirado, que debutaba con picadores, ovación tras aviso y palmas tras dos avisos. |