Autoridad de Sebastián Castella en La México, que abre la puerta grande

La Monumental Plaza México volvió a llenarse para reivindicar la tauromaquia en la primera corrida del LXXVIII Aniversario en la que Sebastián Castella, abrió la primera puerta grande de la temporada. Completaban el cartel, Leo Valadez e Isaac Fonseca, que se fueron de vacío con un encierro desigual de Xajay.

Sebastián Castella saludó por verónicas a «Agradecido», que hizo segundo y fue protestado en la salida. El torero francés inició la faena doblándose para sacarlo a los medios. Pronto le cogió el rito y la altura para torearlo con cadencia, llevándolo largo por ambos pitones. Abrochó con unas ajustadísimas manoletinas y una estocada casi entera fulminante que le valieron la primera oreja de la tarde.

Al cuarto, «Suavecito», lo recibió por verónicas combinadas con chicuelinas. Castella se mostró por encima de un animal reservón en una labor en la que puso él toda la emoción. Basó la faena en la mano derecha, por donde firmó muletazos ligados y con calidad. Se tiró a por todas, dejando un gran espadazo. La segunda oreja cayó en su esportón.

Leo Valadez esperó de rodillas al tercero, al que le propinó dos largas cambiadas para seguir por chicuelinas y tafalleras. El lío con el capote continuó con un quite por lopecinas. El diestro hidrocálido estuvo voluntarioso frente a un animal sosito y rajado. Al natural hizo lo más destacado, peleando contra el viento que hacía. Finalizó con unas manoletinas de rodillas. Tras un pinchazo y media estocada, fue ovacionado.

Al quinto, Valadez, se fue a recibirlo a los medios de rodillas. Se encontró con un animal de embestida irregular que no le brindó ninguna opción. Mató de tres pinchazos y un descabello y fue silenciado.

Isaac Fonseca se fue a recibir a porta gayola a «Bendita Libertad», el toro de su confirmación de alternativa en Insurgente. Tras la ceremonia, el mexicano se fue al centro del platillo de rodillas y con pases cambiados por la espalda firmó un vibrante inicio de faena. Fue lo más destacado con un toro de embestidas cortas e incierto con el que se la jugó.

Con el sexto, Fonseca estuvo arrebatado con el capote. Lo recibió con una larga cambiada de rodillas para proseguir con verónicas y chicuelinas. El quite, por saltilleras y gaoneras hizo las delicias del público. El de Xajay no se lo puso fácil y le exigió en todo momento. El diestro mexicano mostró mucha disposición, pero no pudo encontrar lucimiento. Mató de una estocada y un descabello.

Plaza Monumental de México. Lleno en los tendidos. Toros de Xajay, desiguales de presentación y juego. 

Sebastián Castella, oreja y oreja.

Leo Valadez, ovación y silencio.

Isaac Fonseca, ovación y silencio. 

Incidencias: Isaac Fonseca confirmó la alternativa con el toro con «Bendita Libertad», de Xajay, herrado con el número 120, de 484 kilos.