Diego San Román y el capote de Juan Ortega, en la primera de Monterrey
Diego San Román corta una oreja
Juan Ortega comenzó la temporada mexicana, más importante de sus 10 años de alternativa, en la ciudad de Monterrey. Y lo hizo igual que acabó la española, toreando con el capote de ensueño. A la muleta su lote de Xajay llegó muy desfondado al último tercio.
En su primero la falta de raza y la poca humillación del astado no facilitó la labor a Ortega, que tomó la decisión de abreviar. Antes pudo realizar un quite por delantales que despertó al público regiomontano.
En el cuarto de la tarde llegó lo más destacado de la tarde: un ramillete de verónicas del tercio al centro del ruedo que hizo que el público vibrara. A la postre fue lo más destacado de la tarde. En la muleta brindó al público pero el toro no tenía las mismas intenciones que el sevillano. Su inicio genuflexo nos dejó varios carteles de toros. Echó el freno y Ortega abrevió. Ovación.
En el segundo acto, Armillita consiguió conectar con los tendidos por la falta de repetición de su oponente. El quinto muy rajado, sin fijeza, terminó en las tablas, hasta allí fue Fermín Espinosa mostrando siempre su actitud de triunfar. Media estocada y vuelta al ruedo.
Diego San Román fue el único que tocó pelo en la tarde de hoy. Se enfrentó al mejor lote de la bien presentada corrida de Xajay. El primer oponente tuvo repetición y se arrancó de lejos en el caballo. Su faena mantuvo el interés. Mató de media estocada en buen sitio y cortó la oreja.
En el capítulo que cerraba la tarde se encontró con otro toro que quiso arrancarse de largo. En el tercio final el toro amagó con pararse, pero el torero no se lo permitió. Con la espada perdió el posible. Vuelta al ruedo.
Monumental «Lorenzo Garza» de Monterrey (México). Primera Corrida de Otoño. Media plaza. Toros de Xajay para Juan Ortega, ovación y ovación; Fermín Espinosa «Armillita IV», palmas y vuelta; Diego San Román, oreja y vuelta tras aviso.