Diego Ventura entrega el alma en La Maestranza

El rejoneador paseó las dos orejas del quinto, mientras que Guillermo Hermoso de Mendoza firmó una notable tarde

Diego Ventura ha marcado un listón muy alto en Sevilla este domingo. El rejoneador ha cortados dos orejas de mucho peso en una faena en la que entregó el alma a su plaza. Un triunfo que, una vez más, le vale para reivindicar su centro en el toreo a caballo en el que no tiene rival. No pudo sumar a sus escalofriantes estadísticas una Puerta del Príncipe más por la suerte suprema, como tampoco pudo hacerlo Guillermo Hermoso de Mendoza, que tuvo una actuación muy seria.

Ventura salió a por todas en el quinto demostrando una gran doma sobre «Guadalquivir». Con «Nómada» hizo las delicias con piruetas en las cara de «Sardinero» y, con el toreo a dos pistas, dejándoselo llegar mucho, poniendo al público en pie. Montando a «Lío» formó un alboroto clavando al quiebro y de frente. El momento culmen llegó al sacar a «Bronce» con el que puso banderillas a dos manos sin cabezada. El último tercio lo compartió junto a «Guadiana», poniendo cuatro rosas. Mató de un buen rejonazo de muerte y paseó las dos orejas.

Un premio muy importante, que de haber matado bien a su anterior oponente estaríamos narrando su Puerta del Príncipe número once en su carrara. A este, «Valenciano» de nombre, lo paró Diego Ventura en el centro del platillo y le dejó un sólo rejón de castigo. Con «Fabuloso» toreó a dos pistas junto a tablas en las distancias cortas. Sobre él puso dos banderillas en las que se vio ya al toro más parado. Sacó a «Vivaldo» con el que expuso mucho y colocó un garapullo al quiebro. Cerró con «Guadiana», que tras hacerle una reverencia, clavó a dos manos y, posteriormente, tres rosas. El rejoneador lo puso todo con un animal ya muy apagado y de poca transmisión.

Guillermo Hermoso de Mendoza se fue a esperar junto a «Jíbaro» a la salida de chiqueros a «Culebrito», dejándole un rejón de castigo. El de San Pelayo marcó la querencia pronto, mostrando una falta de raza evidente. Sobre «Berlín» lo lidió a dos pistas, firmando con hermosinas y clavando con solvencia. A lomos de «Martincho» se dejó llegar mucho para provocarlo. Culminó con unas rosas por los adentros pegado a tablas y un par de banderillas cortas a dos manos. Mató de un rejón de muerte.

«Recober», que cerró la tarde, se quedó muy emplazado nada más sentir el rejón de castigo que le puso Guillermo Hermoso de Mendoza sobre «Alquimista». «Berlín» puso la elegancia, pero exponiendo mucho mientras que «Malvec» trajo la mágica con numerosas piruetas. Terminó con «Esencial» con el que dejó dos rosas y dos pares de cortas a dos manos por los adentros. El rejón cayó trasero y precisó del verduguillo por lo que se esfumó la posibilidad de premio.

Sergio Galán colocó dos rejones de castigo a «Ignorado», que se desplazó con brío en los primeros compases de la lidia. A lomos de «Capricho» lo templó a dos pistas y dejó dos banderillas en los medios. Con «Bambino» se adornó y expuso mucho, mientras que con «Óleo» puso tres banderillas cortas. Precisó del uso del verduguillo tras la estocada traserilla que instrumentó y perdió un posible trofeo.

Al cuarto, «Botinero», se fue junto a «Noche» a esperarlo a la mismísima puerta de chiquero. Galán toreó a dos pistas sobre «Capote», citándolo en largo para clavar dos banderillas. «Bribón» imprimió clasicismo a un animal sosito. Volvió a los lomos de «Bambino» para clavar en los medios intentando caldear los tendidos. Abrochó de nuevo con «Óleo», poniendo tres rosas. No estuvo acertado con el rejón de muerte.

Ficha del festejo:
Plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Octava de abono. Feria de Abril. Casi lleno. Toros de El Capea-San Pelayo, bien presentados, nobles en líneas generales, destacando el 5º que fue encastado.
Sergio Galán, ovación con saludos y ovación con saludos.
Diego Ventura, ovación con saludos y dos orejas.
Guillermo Hermoso de Mendoza, ovación con saludos y ovación con saludos tras petición.