Talavante y su zurda alcanzan la gloria en Sevilla
El torero extremeño abrió la Puerta del Príncipe, mientras que Daniel Luque y Sebastián Castella cortaron una oreja
La Maestranza recupera su esplendor por la Feria de San Miguel. Y mayor aún lo es cuando los tendidos se pueblan de aficionados que disfrutan de una buena tarde de toros como la de hoy, en la que se ha lidiado un interesante encierro de Victoriano del Río y en la que Alejandro Talavante ha abierto por segunda vez en su carrera la Puerta del Príncipe. El extremeño cuajó a un gran toro de nombre ‘Dalia’ al que le cortó las dos orejas y al le esculpió naturales para el recuerdo. Aunque la gloria fue para Talavante, la faena de Daniel Luque al tercero merece una lectura aparte. El torero de Gerena tuvo una seria e importante actuación con un toro muy exigente en la que se la jugó todo a carta cabal.
‘Dalia’, emblemático nombre en esta ganadería, metió bien la cara en el capote de Alejandro Talavante. No acabó de emplearse en el peto. Daniel Luque dibujó unas bellas chicuelinas al igual que la media con la que remató el quite. Con unas trincherillas, lo sacó para los medios. La buena condición del toro y la clase que poseía ya se observaron desde la primera la tanda con la mano derecha, que acabó rematando por el pitón izquierdo. El extremeño firmó series de naturales con una gran templanza, con largura y toreando en redondo. Los olés rotos de Sevilla acompañaban cada muletazo desmayado de Talavante con un toro que hizo honor a sus ancestros que tantos triunfos han dado a otros matadores. Cerró genuflexo por bajo y con buen cambio de mano. Se tiró a matar a por todas, resultado cogido sin consecuencias. Dejó una certera estocada y cortó dos orejas. ‘Dalia’ fue premiado con la vuelta al ruedo.
Meció bien los brazos Alejandro Talavante frente a ‘Quitaluna’, un quinto que estaba justito de raza. Aunque las opciones no eran del todo favorables para culminar el triunfo, el diestro extremeño brindó al respetable en señal de que quería ganar la pelea. Con suavidad y sin apretarle para que prolongar su duración, fueron las primeras series. Al natural, le bajó la mano y le imprimió mayor templanza, mientras que el de Victoriano del Río sacó el fondo. La magia de Talavante siguió brotando con su zurda prodigiosa en una faena medida. Otra estocada en todo lo alto y una oreja que fue su lleve para abrir la Puerta del Príncipe.
‘Despreciado’, un tercero serio y en tipo de la casa, al que le dibujó suaves verónicas ganándole terreno Daniel Luque. En el tercio de varas, ya demostró que no tenía las cualidades de sus anteriores hermanos. Fue muy costoso en la muleta, pero el poder del sevillano se impuso empujándolo hacia adelante. Aguantó parones y miraditas con gran valor. Los muletazos que arrancó tuvieron mucho mérito ante el exigente oponente. Puso a los tendidos en pie tras tirar la moneda y apostar al meterse entre los pitones. Un auténtico arrimón con mayúsculas. Tras una estoca un poco traserita, cortó un trofeo.
‘Misigato’, el más feote de la tarde, tomó sin celo ni entrega el capote de Daniel Luque, al igual que lo hizo en el caballo. Lo cuidó mucho el de Gerena en los primeros compases, en los que embistió frenándose y sin transmisión. Lo intentó en las cercanías, pero ante las nulas opciones abrevió.
Sebastián Castella saludó con estéticas verónicas a pies a juntos a ‘Dakar’, que pasó sin terminar de humillar, ni de emplearse en el caballo. Alejandro Talavante quitó con unas ajustadas chicuelinas. El torero francés instrumentó seis estatuarios y muletazos por bajo en el tercio sin moverse ni ápice, en un inicio que tuvo mucha vibración en los tendidos. El de Victoriano del Río tomó la muleta con prontitud y fijeza por el pitón derecho, por donde dejó una soberbia primera serie en la que hubo un extraordinario cambio de mano. Por el izquierdo le costaba más, por lo que volvió a tomar la diestra, pero ya el animal se vino abajo. Abrochó por manoletinas antes de la estocada y paseó una oreja.
El cuarto, ‘Cochabamba’ de nombre, muy alto y ofensivo, no dejó lucirse de capa a Castella. Tampoco lo puso fácil ni en el tercio de varas ni en el de banderillas. La falta de raza y de clase condicionaron la labor del diestro de Beziérs, que sólo pudo justificarse frente a él.
Ficha del festejo: |
Plaza de toros de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Vigesimosegunda de abono. Primera de la Feria de San Miguel. Lleno. Toros de Victoriano del Río, bien presentados y de buen juego en general. El segundo fue premiado con la vuelta al ruedo. 1º, noble y con fijeza; 2º, con clase, humillación y emoción; 3º, encastado y exigente; 4º y 6º, sin raza ni clase; 5º, justo de raza. Sebastián Castella (de azul y oro), oreja y silencio. Alejandro Talavante (de grana y oro), dos orejas y oreja. Daniel Luque (de espuma de mar y azabache), oreja tras aviso y silencio. Incidencias: Al finalizar el paseíllo se guardó en minuto de silencio en memoria de Pepe Luis Vázquez y de Paco Camino. Saludó tras banderillear al primero José Chacón y al tercero, Iván García. |